FREDDY PERDOMO | @SpgFreddy

El “nuevo” Chelsea de Frank Lampard inició la temporada sumando de tres, aunque muy lejos de demostrar el juego que se espera por parte de un conjunto londinense lleno de nuevas caras. Los “Blues” vencieron al Brighton 1-3 en condición de visitante, en la primera fecha de la Premier League.

Chelsea aprovechó los errores del rival, factor que significó la victoria para los visitantes, que capitalizaron una distraída salida del local, para que Werner provocara un penalti que acabaría suponiendo el primer gol del partido, gracias al cobro de Jorginho.

El Brighton empató en la segunda mitad, pero al minuto James puso el segundo. El tercero llegó en una acción a balón parado con algo de fortuna, Zouma remató tras centro de James y su disparo lo desvió un rival.

Werner fue el único que brilló de las caras del proyecto de Abramovic. El otro debutante del partido, Havertz, estuvo gris en la mayoría de sus acciones y le costó mucho entrar en juego. En defensa, el equipo volvió a mostrar la misma fragilidad de la temporada pasada, y por si esto fuera poco, Kepa, que pudo hacer más en el gol de Trossard, vuelve a generar dudas en la portería.

Victoria cómoda de un Chelsea gris, como su camiseta el día de hoy, que aún tiene mucho margen de mejora. De momento con esto le ha valido para sacar los primeros tres puntos del año, pero se antoja complicado que jugando así pueda pelear por la Premier con City y Liverpool.

Source: Meridiano